Las monedas de América Latina enfrentarán un 2025 desafiante debido al fortalecimiento del dólar y a los retos fiscales y políticos de cada país.
Perspectivas para el peso mexicano
Según el banco suizo UBS, el dólar llegaría a 20.73 pesos mexicanos en el primer trimestre y se mantendría alrededor de los 20.55 al final del año.
Jesús Anacarsis López, subdirector de Análisis Económico-Financiero del Grupo Financiero Base, plantea tres escenarios posibles para el peso mexicano en 2025. En un escenario central, el tipo de cambio promedio sería de 19.50 pesos por dólar. En caso de que se implementen aranceles adicionales, el peso podría alcanzar hasta 23 pesos por dólar. En cambio, si hay colaboración entre México y Estados Unidos, el peso podría cotizar en 18.50.
Pronóstico para el peso chileno y peruano
En Chile, los analistas esperan que el dólar cierre el primer trimestre alrededor de los 997 pesos chilenos y termine el año cerca de los 990 pesos chilenos. Según Daniel Velandia, economista jefe de Credicorp Capital, el peso chileno podría estabilizarse cerca de los 950 hacia finales del año. En Perú, se espera que el dólar cierre el primer trimestre en 3.77 soles y llegue a 3.78 al finalizar el año.
Riesgos para el real brasileño y el peso argentino
En Brasil, el alto nivel de deuda en relación con el PIB genera incertidumbre en los mercados. Se proyecta que el dólar se mantenga alrededor de los 6 reales durante el año. En Argentina, se espera que el peso oficial se ubique en 1,093 unidades por dólar en el primer trimestre y alcance las 1,390 unidades al final del año.
Retos fiscales para el peso colombiano
En Colombia, se estima que el dólar cierre el primer trimestre en 4,460 pesos colombianos y llegue a los 4,450 pesos al final del año. Los retos fiscales son la principal preocupación para el peso colombiano.
Las monedas de América Latina enfrentan un entorno desafiante en 2025, pero la implementación de políticas adecuadas y la estabilidad económica pueden ayudar a mitigar los efectos negativos. Los países de la región deben estar preparados para tomar medidas y enfrentar las fluctuaciones del mercado de divisas.